Martín Ortiz es el director de "Petit Bengala", obra que retoma la historia de Alfredo Megna allí donde quedó el unipersonal original ("Bengala"), estrenado en 2007 con singular suceso, que ahora reencuentra al viejo boxeador retirado y con secuelas de su carrera cuidando un galpón junto al Riachuelo, donde aún entrena y adonde llega el joven pupilo que lo tiró a la lona y acabó con su carrera, que le pide que lo inserte nuevamente en el negocio.   La obra, que se puede ver los sábados a las 22.15 en la pequeña sala de El Crisol (Malabia 611), vuelve a estar protagonizada por Néstor Navarría como Bengala, ahora acompañado por Francisco González Gil, como el boxeador que lo mandó al hospital, luego se perdió y quiere una revancha para sí mismo.   Para conocer los alcances de esta nueva propuesta, también escrita por Megna, y los elementos del mundo pugilístico que toman la escena, Télam dialogó con Ortiz ("La noche se está muriendo", "Noches rusas"), que no estuvo a cargo de la primera entrega de la saga pero ya había trabajado con su protagoni sta.